Pez de cuatro ojos Anableps anableps Linnaeus, 1758

El cuerpo del pez de cuatro ojos es alargado y cilíndrico. La parte superior está aplanada y la aleta dorsal, que es pequeña se encuentra situada bastante más atrás de la mitad del cuerpo, las aletas pectorales son amplias y redondeadas, y la aleta caudal tiene un borde algo convexo. La coloración del dorso varía entre gris y pardo oliváceo, y los flancos son más claros, amarillentos o blanquecinos, a menudo con finas líneas longitudinales más oscuras. El cuerpo posee reflejos metalizados violetas o plateados. Pueden alcanzar los 30 centímetros de longitud.

Los ojos son saltones y están divididos en dos partes unidas por un estrecho puente de tejido, cada parte posee una pupila parcialmente unida por el iris con la de la otra parte, la inferior sirve para la visión dentro del agua, y superior sirve para ver lo que ocurre en el aire, por encima de la superficie.

Se alimentan de peces, insectos voladores, larvas y pequeños crustáceos.

La fecundación es interna: el macho posee la aleta anal transformada en un gonopodio que inserta en el orificio genital de la hembra. Sin embargo, existen machos y hembras con los órganos genitales situados a la derecha o a la izquierda del cuerpo, de modo que los machos con gonopodio a la derecha solo pueden copular con las hembras "zurdas", y los machos que lo tienen a la izquierda deberán buscar hembras que tengan el orificio genital a la derecha. Ocho semanas después de la fecundación, la hembra pare crías vivas que podrán reiniciar el ciclo cuando alcancen la madurez sexual, hacia los ocho meses de vida y con unos veinte centímetros de longitud.

Suelen aparecer en pequeños grupos de unos 10 ejemplares. Habitan ríos y estuarios salobres, en zonas costeras del sur de México, Centroamérica, Venezuela, Guyanas y Brasil.

Rev: enero-16