Garcilla bueyera Bubulcus ibis Linnaeus, 1758

Se trata de un ave originaria de África y Asia tropical. Su nombre se debe a que comúnmente se encuentra en compañía de grandes mamíferos, alimentándose de los insectos y otros pequeños animalillos que los mamíferos, van espantando con su paso. En contrapartida, la garcilla avisa a sus socios de los eventuales peligros.

Durante el periodo normal, el plumaje es completamente blanco, con las patas y el robusto pico de color amarillo; durante la temporada de cría, la cabeza, el cuello y el dorso se vuelven castaño claro o anaranjado, y las patas y la base del pico se tornan rojas. Mide cerca de 50 centímetros de largo, un metro de envergadura y puede sobrepasar el medio kilogramo de masa corporal.

Prefiere las zonas de pastizal con la hierba no muy crecida, hasta por encima de los 2000 metros de altitud.

Anida en grandes colonias sobre árboles cercanos a ríos o lagos. Los nidos son plataformas desordenadas de ramitas. La puesta consta de entre 1 y 6 huevos de color azul celeste o verdoso, que son incubados durante unos 24 días por ambos progenitores. Los pollos abandonan el nido al mes y medio de vida, aproximadamente.

Acompañando a los animales domésticos, la garcilla bueyera se está extendiendo por todo el mundo, a excepción del continente antártico, con notable rapidez. Algunas poblaciones realizan migraciones estacionales y los juveniles divagantes pueden alejarse hasta 5000 kilómetros de sus áreas de cría.

Rev: enero-16