Picogordo Coccothraustes coccothraustes Linnaeus, 1758

El picogordo es de color pardo anaranjado, con la cabeza más anaranjada y un antifaz negro característico que se extiende hasta la barbilla. Los laterales y la parte posterior del cuello son de color gris claro. Las alas aparecen abigarradas de colores oscuros entre los que sobresale una franja blanca y las puntas de color azul intenso. Las patas son cortas de color rosáceo. Puede alcanzar los 18 centímetros de tamaño y los 35 de envergadura alar. Las hembras son ligeramente más pequeñas y su plumaje resulta mucho más apagado.

En su cabeza grande y redonda, destaca el poderoso pico cónico capaz de ejercer una fuerza de aplastamiento de hasta 50 kilos, con los que este pájaro rompe los huesos de los frutos, incluso de la aceituna, para alimentarse de la almendra de su interior.

Después de un cierto cortejo tiene lugar el apareamiento. El nido lo comienza el macho, que es quien elige el emplazamiento en grandes árboles y coloca las primeras estructuras, luego lo completa la hembra que acaba revistiéndolo de pelo. La puesta consta normalmente de 4 o 6 huevos de color variado y motas pardas. La incubación dura unos doce días y la realiza la hembra mientras es alimentada por el macho.

Al nacer, los pollos están cubiertos de un largo plumón blanco y son alimentados con insectos y larvas. Abandonan el nido antes de las dos semanas de vida, aunque siguen siendo atentidos por ambos progenitores durante otras dos semanas.

Es un pájaro sigiloso y difícil de observar. Habita principalmente los bosques caducifolios de Europa y Asia hasta Japón, y en el norte de África. Realiza migraciones parciales. También puede ser visto en bosques mixtos y en parques y jardines, siempre que encuentre semillas y cerca de un fuente de agua. En invierno se desplazan a bosques con cerezos, tejos, ciruelos y otras especies que les sigan proporcionando alimento.

Rev: noviembre-11