Avispa cuco Chrysis cf. ignita Chrysis ignita Linnaeus, 1761

La cabeza y el tórax de esta pequeña avispa tienen una coloración que varía entre el verde brillante y el azul, a veces con capas de brillo dorado. Los ojos son grandes y bien desarrollados. El abdomen es de color rojo profundo, muy llamativo y sólo tiene tres segmentos visibles, tanto en los machos como en las hembras. El aguijón no es funcional como medio defensivo y se usa sólo de ovospositor. Miden entre 5 y 10 milímetros de tamaño.

El exoesqueleto, muy esclerotizado, presenta una textura de hoyuelos que semejan a una pelota de golf. Cuando son molestadas se encogen en forma de bola, protegiendo las partes abdominales blandas. Esta misma estrategia impide que las avispas parasitadas le claven sus aguijones.

Parasitan una amplia variedad de avispas solitarias. Depositan sus huevos en los nidos de los hospedadores y las larvas, que nacen antes, se alimentan de los huevos o de las larvas de la especie hospedadora.

Se puede encontrar por todo el Paleártico, aunque no es muy numerosa.

Se trata de un grupo de especies muy difíciles de diferenciar sin recurrir a estudios pormenorizados de la genitalia. Proponemos Chrysis ignita por ser la especie más común del grupo.

Rev: julio-18