Mantis palo Empusa pennata Thunberg, 1815

Las hembras de esta gran mantis alcanzan los siete centímetros de longitud, siendo los machos ligeramente más pequeños. Presentan una coloración variable desde el verde hasta el pardo, que pueden adaptar al entorno.

El aspecto es especialmente estilizado, con la cabeza pequeña con una protuberancia entre las antenas. El tórax es largo y delgado, y el abdomen pequeño y curvo. El primer par de patas está sensiblemente adelantado. Los adultos poseen alas, pero las ninfas no; las hembras son muy voluminosas y les cuesta volar. Las antenas de los machos son plumosas, mientras que las de las hembras son filiformes.

Pasan el invierno en forma de ninfas y los adultos emergen en primavera.

Se encuentran exclusivamente en la Península Ibérica, el litoral continental mediterráneo de Francia, Italia y el norte de África. También en la mayoría de las grandes islas del Mediterráneo occidental.

Habitan en zonas cercanas al litoral y en zonas de matorral seco; en superficies de escasa vegetación, con arbustos diseminados, donde su camuflaje es tan perfecto que resulta imposible descubrirlas. Se alimentan, al acecho, de insectos y otros pequeños invertebrados, que son sujetados con sus patas anteriores modificadas para la captura, y devorados inmediatamente.

Rev: marzo-18