Explorador de taxones - Clase: Reptilia
Clase: Reptilia
Los reptiles se caracterizan por presentar el cuerpo cubierto por una capa córnea desarrollada con escamas epidérmicas de queratina, sostenidas en algunos casos con placas óseas que forman un caparazón.
En general, presentan dientes implantados en alveolos o soldados a las mandíbulas. Su sistema normal de locomoción es la reptación.
La respiración se realiza por pulmones (algunos presentan también respiración cloacal). La circulación es doble e incompleta (excepto en los cocodrilos), y los glóbulos rojos son nucleados.
El sistema nervioso se caracteriza por el escaso desarrollo cerebelar y poseen doce pares de nervios craneales además del nervio terminal.
Aunque los reptiles tienen sangre fría, con frecuencia se calientan tomando el sol; una vez que se han calentado pueden moverse más rápido.
Presentan sexos separados y fecundación interna. Son ovíparos u ovovivíparos y realizan la puesta siempre en la tierra. Las crías no sufren metamorfosis.
La piel dura que impide la desecación así como la cáscara de los huevos casi completamente impermeable, les permite a los reptiles vivir lejos del agua, en algunos casos, en los lugares más secos del planeta. De manera que las cerca de 6.000 especies que se conocen han colonizado todo el planeta, excepto los ambientes muy fríos.
Los reptiles se originaron a partir de anfibios durante el periodo Pérmico, diversificándose durante el Triásico, el Jurásico y el Cretácico. A finales de este periodo desaparecieron casi por completo varios grupos en la gran extinción masiva del Cretácico-Terciario, hace unos 65 millones de años.
Rev: enero-11