Tiburón ballena Rhincodon typus Smith, A., 1828

Es el mayor de los peces, un verdadero leviatán marino que puede medir más de 15 metros y poseer una boca de más de 1,5 metros de anchura. Sin embargo, es completamente inofensivo, pues su alimentación se basa en pequeños peces y crustáceos que atrapa nadando lentamente con su boca abierta, haciendo pasar todo el agua por los peines branquiales, que retienen el alimento.

Por la parte superior, la piel es de color gris oscuro con multitud de puntos y líneas horizontales y verticales blancas o amarillentas, que pueden formar una especie de damero. El diseño dorsal es único en cada ejemplar y sirve para reconocerlo. El vientre es de color blanco. El cuerpo es alargado y robusto, con la cabeza ancha y aplanada. Tiene cinco pares de branquias con hendiduras enormes. Poseen un par de aletas dorsales y las pectorales son muy poderosas. La cola de los adultos tiene forma de media luna, pero en los jóvenes es sensiblemente mayor el lóbulo superior.

Tiene los ojos pequeños, y, a pesar de no necesitarlos, tiene multitud de dientes dispuestos en más de 300 filas.

Parecen ser ovovivíparos y los recién nacidos miden unos 50 centímetros de tamaño. Se estima que pueden tener una longevidad cercana a los 100 años.

Habita en aguas cálidas tropicales y subtropicales de todos los mares del mundo. Es un animal que habita lejos de las costas, aunque en determinadas ocasiones se aproxima a éstas, entrando en los atolones de coral e incluso en los estuarios de diversos ríos. Los lugares donde es más posible su avistamiento, reciben una gran cantidad de "ecoturistas", por lo que estos animales son una importante fuente de ingresos para las poblaciones.

Aunque pueblan los mares desde hace 60 millones de años, no fueron conocidos por la comunidad científica hasta bien entrado el siglo XIX.

Rev: mayo-11